Esta propiedad se encuentra en una ubicación céntrica pero tranquila, a solo unos pasos de la zona comercial de Jaime III y del Paseo Borne, con sus encantadores cafés y restaurantes.
La residencia reformada combina mucho carácter con un toque de elegancia. Se accede al edificio de estilo palaciego a través de un hermoso patio interior, y un ascensor lleva cómodamente hasta el segundo piso. Uno de los elementos más atractivos del apartamento son las dos puertas originales de madera maciza mallorquina, que aportan un encanto especial al espacio. El apartamento moderno consta de un luminoso salón-comedor, realzado por vigas de madera vistas en el techo que crean un ambiente cálido y acogedor. Otro detalle destacable son los techos altos y los detalles en piedra *Mares* en las paredes. La cocina minimalista se accede por tres pequeños escalones. Para mayor comodidad, se ha instalado un nuevo tendedero frente a la ventana, y las ventanas de doble acristalamiento, junto con los aires acondicionados en el salón y el dormitorio, garantizan una temperatura agradable durante todo el año.
El dormitorio no solo es muy espacioso, sino también muy luminoso y cuenta con amplios espacios de almacenamiento.
Esta propiedad está idealmente situada en pleno centro de la ciudad.