Tanto si se trata de un edificio nuevo como de un proyecto de renovación en un edificio antiguo: cualquiera que esté planificando una renovación de la calefacción debería examinar detenidamente los sistemas de calefacción del futuro. Porque aunque los sistemas de calefacción con combustibles fósiles suelen ser baratos a la hora de comprarlos, su funcionamiento cuesta mucho dinero a lo largo de los años. El gas natural y el gasóleo de calefacción dependen del mercado mundial y, al mismo tiempo, sólo están disponibles en cantidades limitadas. Por ello, los sistemas de calefacción basados en el gasóleo de calefacción o el gas natural no están preparados para el futuro. El coste de los combustibles fósiles está gravado adicionalmente por el legislador con un impuesto sobre el CO2, que los encarece aún más. Los sistemas modernos de calefacción con fuentes de energía renovables, como la solar o las bombas de calor, protegen el medio ambiente. Las energías solar, eólica, geotérmica o hidráulica están disponibles gratuitamente para este fin. Esto reduce en gran medida los costes de energía en el futuro. Gracias a los sistemas de calefacción energéticamente eficientes, los propietarios son más independientes de los proveedores de energía y de la política. Los sistemas de calefacción, como las bombas de calor, la energía solar térmica o la calefacción con biomasa, contribuyen a la transición térmica como una parte importante de la transición energética. Pero, ¿qué sistema de calefacción del futuro es el adecuado para los edificios antiguos o nuevos?