Penthouse dúplex con terraza y mucho espacio para la creatividad

Esta propiedad combina historia y potencial de modernización cerca del puerto. El encanto de tiempos pasados se refleja en detalles arquitectónicos que podrían ser cuidadosamente restaurados e integrados armoniosamente en un entorno residencial moderno. Destaca sin duda su ubicación única en este lugar especial donde se puede disfrutar de vistas ininterrumpidas hasta el mar, sin que la vista se vea interrumpida por la proximidad de otro edificio. Además, siempre es un placer observar el bullicio en la soleada plaza. La superficie real es de 188 m², aunque el registro catastral muestra un número diferente, como suele ocurrir con los edificios históricos. Data aproximadamente del año 1950 y fue renovado por primera vez en 1992. En aproximadamente 188 metros cuadrados, el apartamento en dos niveles ofrece un espacio ideal para una remodelación creativa. Los techos con vigas de madera típicas y los suelos de baldosas antiguas coloridas refuerzan su carácter individual. Aquí tiene la oportunidad de hacer realidad sus sueños personales de vivienda a través de un diseño interior a medida. La gran terraza en la azotea con vistas al mar está aún intacta. Aquí puede dar rienda suelta a su creatividad. Desde lo alto, no solo puede disfrutar de una bebida refrescante mientras admira la vista fantástica, sino también absorber mucho sol mientras mira continuamente hacia el mar. Disfrute del animado casco antiguo, elegantes boutiques y exquisitos restaurantes y cafés que dan a Palma su aire cosmopolita. En conjunto, esta propiedad ofrece un potencial excepcional en una ubicación privilegiada que combina historia, cultura y calidad de vida de manera única. El apartamento se encuentra en un edificio histórico directamente en la idílica Plaça de la Llotja, una plaza central llena de historia, en el corazón del barrio antiguo.