Casa de campo mediterránea con licencia ETV, privacidad y vistas panorámicas en el norte de Mallorca

Esta encantadora finca rústica está situada en medio de un idílico naranjal cerca de Muro, ofreciendo absoluta tranquilidad y privacidad, al mismo tiempo que el animado puerto de Can Picafort y la playa de ensueño de Playa de Muro se encuentran a pocos minutos en coche. En una parcela de más de 20.000 metros cuadrados se alza esta finca parcialmente renovada, que combina el encanto mallorquín con el confort moderno. La vivienda dispone de cuatro dormitorios y tres baños. En la planta baja, la cocina moderna se abre a un luminoso salón-comedor, donde una estufa de pellets y el aire acondicionado crean un ambiente acogedor. En este nivel también se encuentra un dormitorio, un baño, un práctico lavadero con acceso directo al exterior, así como una terraza cubierta ideal para relajarse. En la planta superior le esperan tres dormitorios adicionales, un amplio baño familiar y un aseo adicional. Desde aquí se disfruta de unas impresionantes vistas sobre las suaves colinas y hasta la majestuosa Sierra de Tramuntana. Un punto culminante es la gran piscina privada de agua salada, que ofrece amplias vistas panorámicas. Igualmente destacan la histórica torre de piedra natural y un anexo que se presta perfectamente para su acondicionamiento como apartamento de invitados independiente. La propiedad se completa con un baño exterior, un espacioso garaje para varios vehículos, un pequeño taller y diversas dependencias aptas para uso agrícola. La finca convence por numerosos detalles como ventanas de doble acristalamiento, climatización en las zonas de estar y una abundancia de plantas mediterráneas, incluyendo cientos de naranjos, otros cítricos y olivos. Este excepcional conjunto se completa con la codiciada licencia de alquiler vacacional, lo que lo convierte tanto en un refugio privado como en una atractiva inversión. No dude en contactarnos para más información o concertar una visita.