Alquiler como forma de vida

¿Por qué vivir de alquiler?

En la actualidad, cada vez es más habitual que los usuarios busquen vivienda en alquiler, lo cual indica un cambio en la cultura predominante de la propiedad en nuestro país. Ante esta situación, surge la siguiente pregunta: ¿cuáles son los beneficios que el arrendamiento puede ofrecer? Para responder a esta cuestión, te detallamos varias ventajas que hacen del alquiler una opción atractiva para muchas personas. ¡Veamos cuáles son!

• Flexibilidad: el alquiler es una opción flexible, ya que los contratos de arrendamiento suelen tener una duración determinada. Esto significa que los inquilinos pueden mudarse con más facilidad cuando lo necesiten. Basta con comunicarle al casero su intención de abandonar la vivienda con la antelación suficiente o la que se haya reflejado en el contrato.
  

• Facilidades para teletrabajar: gracias a la pandemia, el teletrabajo se ha convertido en un modo de vida para muchos. Al no necesitar acudir presencialmente a la oficina, puedes desempeñar tus funciones desde cualquier punto geográfico. Así que aquellas personas que quieran experimentar lo que es vivir en otra localidad se verán beneficiadas también del alquiler, ya que podrán irse de ese lugar cuando quieran: si les surge un nuevo empleo o quieren comenzar de nuevo en otro lugar, por citar algunos ejemplos.
  
  

• Menos responsabilidades financieras: el propietario es quien se encarga de los costes de mantenimiento y reparación de la propiedad, así como de los impuestos y los seguros correspondientes. De esta manera, el inquilino puede disfrutar de un hogar sin tener que preocuparse por estos gastos adicionales.
  

• Menos compromiso: el arrendamiento es una opción ideal para aquellos que no están seguros de si quieren establecerse en un lugar durante un período de tiempo prolongado. El alquiler permite a las personas probar diferentes áreas, lo cual te ayudará a decidir en qué zona prefieres comprar.
  

• Servicios incluidos: algunos propietarios incluyen servicios básicos como agua, electricidad, gas, internet y cable en el precio del alquiler, lo que puede ser una gran ventaja para el inquilino y puede suponer un gran ahorro mensual.
  

• Posibilidad de vivir en zonas premium: brinda la oportunidad de residir en zonas más prime de una ciudad. En muchos casos, los precios de compra de propiedades en estas zonas son demasiado altos, lo que significa que la opción del alquiler es una alternativa más accesible y conveniente. Al elegir vivir de alquiler en estas zonas, se puede acceder a un estilo de vida más exclusivo sin tener que realizar una gran inversión inicial.
  

• Menos inversión inicial: en este caso, no es necesario disponer de una gran cantidad de dinero para un pago inicial, solo se requiere un depósito de seguridad y el primer mes de alquiler para comenzar a habitar la propiedad.
  

A grandes rasgos, estas son algunas de las ventajas más conocidas de vivir de alquiler. Ten en cuenta que cada persona es un mundo y las condiciones serán diferentes en cada caso. Además, la edad, la situación familiar o el nivel formativo serán algunos de los aspectos determinantes para apostar, o no, la idea del alquiler.

Alquilar o comprar una casa, ¿cuál es la mejor opción?

Antes de decidir entre alquilar o comprar una propiedad, es crucial considerar diversos factores y evaluar minuciosamente tanto los pros como los contras de cada opción. 

En este sentido, adquirir una vivienda puede ser una alternativa atractiva si se busca estabilidad a largo plazo, se desea invertir en una propiedad y se quiere tener la libertad de personalizarla con reformas. Además, con el transcurso del tiempo, la propiedad puede incrementar su valor y representar una inversión rentable. No obstante, la compra de una vivienda implica gastos iniciales significativos, como los de mantenimiento y reparación, impuestos o costes del seguro.

En este sentido, el alquiler puede ser una opción favorable si se busca flexibilidad y se desea evitar el compromiso financiero y temporal que conlleva la compra de una propiedad. Al alquilar, no es necesario preocuparse por los gastos adicionales del inmueble y se puede cambiar de residencia con mayor facilidad.

En definitiva, después de plantearte las diferentes razones por las que deberías comprar o alquilar una vivienda, solo faltaría tomar una decisión en función de las necesidades y preferencias personales, la situación financiera y la estabilidad laboral. En otras palabras, valora con detenimiento todos estos factores para tomar la decisión más acertada y cuenta siempre con el acompañamiento de un experto inmobiliario.