Enclavado en un entorno natural de una belleza indescriptible, este chalet único se alza majestuosamente en un terreno de 1300 metros cuadrados, rodeado por un exuberante bosque que le otorga un aura de privacidad y conexión con la naturaleza. Estratégicamente ubicado en la falda del Coll de la Teixeta, este hogar ofrece vistas impresionantes del mar mediterráneo y toda la costa Dorada.
En la plataforma más amplia y nivelada se erige el chalet. La edificación se asienta sobre una plataforma de acero corten, que no solo se convierte en un lienzo contemporáneo, sino también en un punto de apoyo para la casa y los espacios exteriores. Desde aquí, se despliega una vista panorámica de la majestuosa piscina que refleja el cielo y el paisaje circundante, la terraza perfectamente diseñada para momentos de relajación y reuniones al aire libre, y un jacuzzi que promete ser un santuario de serenidad.
Al entrar a esta propiedad, te encuentras con un espacio luminoso y abierto que integra una cocina moderna y un acogedor salón. Las paredes acristaladas se abren al espectáculo hipnotizante del mar mediterráneo, permitiendo que la luz natural inunde cada rincón. La cocina, equipada con electrodomésticos de vanguardia, ofrece la oportunidad de preparar deliciosas comidas mientras se disfruta de la brisa marina y la vista al horizonte.
Desde el salón, se accede a una terraza frontal que parece fusionarse con el agua azul turquesa. Una piscina deslumbrante y un jacuzzi invita a relajarse mientras se contempla el cambio de colores del cielo al atardecer.
La distribución interior de la casa es inteligente y funcional. Cuatro habitaciones excepcionales completan el diseño. Tres habitaciones individuales ofrecen la privacidad ideal para los miembros de la familia o los invitados. Una cuarta habitación, la suite principal, combina lujo y tranquilidad. Desde aquí, se puede contemplar el amanecer mediterráneo o disfrutar de la brisa marina desde la comodidad de la cama. El baño en suite es un oasis de relajación con detalles de diseño y una vista al mar que complementa la experiencia.
Un baño compartido, diseñado con elegancia, ofrece comodidad adicional para los residentes. Junto a él, una habitación de lavandería con instalaciones modernas hace que las tareas domésticas sean sencillas y convenientes.
El diseño de la casa es una sinfonía entre la arquitectura moderna y el entorno natural. En el centro de esta armonía, un chalet equipado con suelo radiante brinda confort en todas las estaciones. La topografía del terreno juega un papel crucial en la configuración del espacio, ya que desciende de norte a sur en una danza perfectamente orquestada. Un bancal de piedra de junta seca, como un testigo del tiempo, divide el terreno en dos plataformas distintas y bien definidas.
El chalet se convierte en un refugio en sí mismo. Cada detalle arquitectónico, desde las líneas limpias de su diseño hasta la elección de los materiales, refleja un compromiso con la elegancia y la funcionalidad. La vivienda está meticulosamente distribuida para maximizar las vistas al bosque mediterráneo que se extiende en un abrazo natural.