Ubicada en una posición privilegiada sobre una ladera en las afueras de A Guarda, esta vivienda ofrece un espectáculo visual inigualable: vistas panorámicas al majestuoso océano Atlántico, al río Miño en su desembocadura y a los suaves relieves del paisaje gallego. Construida en 1978 con materiales de alta calidad, la casa combina elegancia, solidez y un diseño pensado para disfrutar al máximo de su entorno natural.
Con una superficie de 288 m², la propiedad se encuentra rodeada por una extensa parcela ajardinada de 2.847 m², que brinda total privacidad y numerosas posibilidades para crear rincones paisajísticos únicos. Su acceso es cómodo y práctico, ya sea en coche, a través de un portón automático que da paso a un amplio espacio de estacionamiento y garaje para varios vehículos, o caminando desde la calle, permitiendo disfrutar de su encantadora entrada.
Espacios que Invitan a Vivir y Disfrutar.
La vivienda, distribuida en tres niveles, está diseñada para adaptarse a diferentes estilos de vida:
Planta Semisótano: Este nivel cuenta con una gran estancia multiusos, bañada por luz natural gracias a sus amplios ventanales con vistas a los jardines. También incluye un despacho, un baño completo y una práctica zona de lavadero.
Planta Principal: Subiendo unos escalones desde la calle, nos recibe un porche encantador, ideal para relajarse contemplando el paisaje. Desde allí, se accede a un amplio recibidor que conecta con los principales espacios de la casa. Una cocina funcional con comedor diario, un salón lleno de luz natural y un comedor formal, todos diseñados con grandes ventanales que enmarcan las vistas del entorno.
Zona de Noche: Tres dormitorios amplios y luminosos, un despacho y un baño compartido completan esta planta. Cada habitación ofrece una perspectiva única del río, la ciudad y el océano, creando un ambiente de paz y conexión con la naturaleza.
Un Jardín para Soñar.
El exterior es una extensión de su encanto, con árboles maduros y rincones ajardinados que invitan a disfrutar de la tranquilidad del entorno. Su amplio terreno es ideal para personalizar espacios según tus necesidades o simplemente dejarte llevar por su belleza natural.
Esta propiedad es mucho más que una casa, es un refugio perfecto para quienes buscan un equilibrio entre serenidad y cercanía. Ideal para parejas o familias, combina el encanto de la vida semi-rural con la comodidad de estar a un paso del centro de A Guarda y todos sus servicios esenciales.
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A Guarda, conocida como "La Villa de los Tres Abrazos" por su conexión con el océano Atlántico, el río Miño y el Monte Santa Trega, es un pintoresco municipio situado en el suroeste de Galicia, en la provincia de Pontevedra. Este lugar mágico combina historia, naturaleza y tradiciones en un entorno que cautiva a todos sus visitantes.