Finca con vistas panorámicas de ensueño y máxima privacidad cerca de Santa Margalida

Ubicada en el tranquilo interior de Mallorca, esta acogedora finca se asienta en una parcela privada de unos 7.000 m² y ofrece vistas despejadas que se pueden disfrutar desde muchos rincones de la casa. Aunque goza de mucha privacidad, está muy bien comunicada: el encantador pueblo de Santa Margalida está a solo siete minutos en coche. La vivienda tiene unos 100 m² construidos y cuenta con tres dormitorios, dos baños, un salón-comedor con cocina integrada y techos altos que le dan amplitud. Una estufa rústica aporta calidez y carácter al espacio. Casi todas las estancias conectan directamente con el exterior, lo que permite disfrutar al máximo del entorno. La terraza cubierta es perfecta para relajarse al aire libre, y desde allí se accede a la zona de piscina, protegida por vegetación mediterránea que brinda privacidad. Una escalera metálica lleva a la azotea de unos 20 m², desde donde se puede contemplar una vista de 360° que alcanza hasta la Bahía de Alcúdia – una auténtica joya. La casa está ubicada en el centro del terreno, rodeada de un jardín cuidado con esmero. El acceso dispone de varias plazas de aparcamiento, y en la parte trasera del terreno hay un campo de fácil mantenimiento, ideal para diferentes usos. Toda la finca está vallada, lo que aporta tranquilidad y seguridad. Más allá de su encanto arquitectónico y su buena ubicación, la casa cuenta con detalles que la hacen muy cómoda para vivir todo el año: aire acondicionado, calefacción central de gas, pozo propio, sistema automático de riego y conexión a la red eléctrica. La zona de piscina ha sido diseñada con mimo para ofrecer un espacio de descanso privado, sin interrupciones. Esta finca es una opción ideal para quienes buscan disfrutar de la vida en Mallorca con tranquilidad, rodeados de naturaleza, pero sin renunciar a las comodidades.