Finca emblemática en Valldemossa

Ya existía conocimiento de esta propiedad en el registro de la comunidad que data del año 1863. A principios del siglo XX, la propiedad de aspecto majestuoso ya se conocía en su aspecto actual con torres, de ahí el nombre de S'Atalaya, que significa algo así como observación o torre de vigilancia. Los propietarios actuales han logrado crear una joya con mucho cariño y detalle a lo existente y con materiales exquisitos. Se trata de una renovación total tanto en interiores como en exteriores. Impresionante es ya el generoso hall de entrada que continúa en todas las áreas de la casa; como en la sala de estar y la acogedora sala con chimenea. Increíbles son también las vistas del paisaje natural que rodea la propiedad y que se extiende hasta el pintoresco pueblo. Además, en el borde de las magníficas terrazas hay dos dependencias, una destinada a un trastero, la otra ha sido insonorizada y podría usarse como estudio de música. El equipamiento técnico está actualizado tanto con la calefacción por suelo radiante y el aire acondicionado mediante bomba de calor. Las ventanas son de doble acristalamiento y los marcos son de madera maciza. En el momento se está tramitando una licencia para construir una piscina. Esta es una propiedad incomparable de encanto especial. Un oasis de paz y privacidad.